Proyecto Pulpería: entregará cinco terrenos a familias que quieran migrar al campo para trabajar
El periodista Leandro Vesco recorre la provincia de Buenos Aires buscando historias y lanzará una campaña para repoblar una localidad.
Desde hace casi dos décadas que Leandro Vesco se dedica a recorrer la provincia de Buenos Aires y contar la historia de los pueblos que la componen. Pero además, desde la ONG que preside, planea una nueva campaña, que lanzará en unas semanas, para entregar cinco terrenos a familias que quieran migrar a una localidad bonaerense.
Vesco, además de periodista, es presidente del Proyecto Pulpería, una ONG que nació en 2007 para “recuperar, proteger y revalorizar la vida rural bonaerense”. La organización tiene como objetivo fomentar el turismo rural y la repoblación de los pequeños pueblos de la provincia. “El proyecto lo inicié como viaje familiar con mi esposa. Ambos somos muy inquietos y hace varias décadas que estamos ligados al campo”, afirma Vesco. Su padre era geólogo y solía trabajar “tierra adentro”, donde se internaba durante días. “A veces yo lo acompañaba y ahora, recuerdo con distancia y perspectiva, que cuando terminaba el día, los geólogos e ingenieros agrónomos terminaban la jornada en una pulpería tomando una copa e intercambiándose las novedades. Mientras, yo tomaba mi gaseosa y escuchaba las historias de esos hombres”. Probablemente allí haya nacido su interés por lo rural y, en especial, por las pulperías.
Si bien nació en Entre Ríos, las rutas bonaerenses son su mapa. “En nuestros primeros viajes advertimos tejidos culturales, productivos y sociales rotos. Veíamos las estaciones de tren abandonadas, pueblos y parajes que desaparecieron. Vimos todo eso en estado terminal y en seguida nos propusimos hacer la ONG”, describe.
La repoblación rural
Desde la fundación, en 2014 y en 2017 implementaron dos campañas de repoblación que resultaron exitosas, una en la localidad de Gascón y otra en El Faro. “Sacamos como conclusión que el cambio de vida es posible, pero es una decisión”, indica.
El proyecto está planeado para llevarse a cabo, nuevamente, en Gascón, de la mano de la misma persona que ayudó con el esquema en 2014, Gregorio Aberasturi, un habitante del pueblo que tiene como sueño revivir a su ciudad.
El plan es que cinco familias reciban cinco terrenos de varias hectáreas, sin costo, para llevar adelante emprendimientos sustentables y de impacto social. Las condiciones son que las construcciones sean ecológicas y que las familias dispongan de los fondos para realizar los emprendimientos. Pero el negocio es libre y puede ser de lo más variado, desde un complejo de hospedaje hasta la producción de pollos orgánicos. “No queremos llevar gente ociosa, lo importante es trabajar y llevar a cabo el proyecto”, explica Vesco.
Una vez que lancen la convocatoria, realizarán visitas y recorridos a la localidad para que los posibles habitantes conozcan cómo es vivir en el campo. “Es apostar a un cambio de paradigma familiar, que los padres e hijos almuercen y cenen juntos y que lleven adelante emprendimientos agroecológicos familiares”, sostiene Vesco, para quien la repoblación rural es el “camino a seguir en esta pospandemia”.
Sobre las experiencias de repoblación, Vesco no lo duda: “Duermen mejor, su entorno no es más violento, pueden ver el amanecer y el atardecer”. Sin embargo, la vida rural puede tener sus aspectos negativos: “Algunos extrañan tener a mano un kiosco y una solución siempre. Tienen que amigarse con el invierno largo, saber que si llueve no pueden salir del pueblo, porque los caminos siempre están en mal estado, y acostumbrarse a que los médicos vayan una vez por semana”, agrega.
Sumado al proyecto, Vesco se dedica a la comunicación. “Mi idea como periodista es poner el foco en lo pequeño y establecer el mapa del olvido bonaerense, con los parajes y pueblos como protagonistas”, define.
Vesco lleva recorridas 48 pulperías de la provincia y su objetivo es difundirlas, mediante artículos periodísticos que funcionan a modo de “cartelera”. “Cada una de las notas significa que la gente va a ir a una pulpería o a un pueblo. Mi objetivo es generar trabajo”. Es consciente de que la difusión es clave para la revitalización de estos espacios.
Como parte de su propuesta literaria, lleva escritos dos libros sobre el tema, “Desconocida Buenos Aires: historias de frontera” y “Desconocida Buenos Aires: secretos de una provincia”. Además, está trabajando en una tercera guía de hospedajes y pulperías bonaerenses, “para que cualquier lector que esté en la provincia de Buenos Aires sepa que a tantos kilómetros tiene una actividad, un almacén de ramos generales o un rincón para pasar sus días”.
Para Vesco este es un cambio de paradigma que ya comenzó y que, si bien debido a la cuarentena está frenado, viene con un fuerte impulso. “En marzo había movimiento en las pulperías y reservas en los hospedajes rurales”, ejemplifica. Además, cuenta que incluso durante la pandemia se revalorizaron este tipo de establecimientos. “En muchos lugares ante la imposibilidad de circular, las pulperías fueron los únicos espacios para comprar provisiones”, asegura.
Sobre el trabajo que lleva adelante, el periodista se muestra conforme. “Muchas personas se enteraron a través de este trabajo de la existencia de estos lugares y comenzaron a hacer circuitos. Hay motociclistas, ciclistas y familias que se aventuraron a lugares donde la intuición debe ser copiloto porque los caminos no están señalizados”.
Ama a todos los pueblos bonaerenses, dos son sus preferidos. San Andrés de la Sierra, que tiene sólo 40 habitantes y está ubicado a los pies de la sierra de La Ventania, y Los Ángeles, al sur de Necochea, donde hay una pulpería marítima.