Por los hechos violentos durante la usurpación de terrenos en Belén, ya hay imputados que deberán quedar 45 días en prisión preventiva; y de ser condenados, tendrán cárcel de cumplimiento efectivo.
De todas maneras, al considerarlo «un reclamo social» el fiscal Mai pidió a la Municipalidad y a la provincia que actúen con mediadores «para que procuren una solución pacífica al conflicto».
A raíz de las investigaciones llevadas a cabo por los hechos violentos del jueves 10 de junio de 2021, en ocasión de la usurpación de un predio urbano ubicado en calle 47, entre 76 Y Pasaje 74, propiedad privada del Sr. Horacio Lino Cian, en el Barrio Belén de la ciudad de Reconquista, el Fiscal Leandro Mai imputó a Agustín Benítez Pinto, 21; Soledad Macarena Soto, 27; y Rodrigo Ezequiel Aquino, 20; los delitos de portación de arma de guerra en concurso ideal con abuso de arma de fuego, atentado agravado contra la autoridad por ser a mano armada, por poner manos en la autoridad y por ser cometido por una reunión de más de tres personas; y daño calificado, por haber sido cometido a los fines de impedir el libre ejercicio de la autoridad o en venganza de sus determinaciones, tal lo establecen los artículos 45, 54, 104, 184 inc. 1, 189 bis inc. 2 y 238 inc. 1,2 y 4 del Código Penal, que establece pena mínima de 3 años y 6 meses de prisión; y un máximo de 8 años y 6 meses.
En la audiencia realizada el sábado 12 de junio de 2021, el fiscal atribuyó a los imputados «y a otras personas que aún no fueron identificadas», haber atacado al personal policial que se encontraba en el lugar cumpliendo funciones, disparándoles con armas de fuego de fabricación casera (tumberas, las que son reprochadas como arma de guerra); y de haberles arrojado toda clase de elementos contundentes con los cuales provocaron lesiones a 13 agentes policiales, además de dañar cinco móviles policiales que se encontraban en el lugar, ocasionando la rotura de vidrios de las ventanillas, parabrisas y abolladuras en distintos lugares, y también dañaron una máquina de la Municipalidad de la ciudad de Reconquista que fue atacada para evitar que desempareje el nivel del piso del predio usurpado.
La jueza Claudia Bressán declaró legal las detenciones y dispuso prisión preventiva por 45 días para Agustín Benítez Pinto y Soledad Macarena Soto, pero en el caso de la dama, será bajo modalidad domiciliaria porque tiene un bebé. Lo de Soledad Soto fue acordado entre el fiscal y la defensora pública Maria Noel Severo; pero lo de Benítez lo decidió la jueza luego de la discusión entre las partes, ya que el fiscal había solicitado prisión preventiva sin plazo.
Falta ahora resolver la medida cautelar sobre Rodrigo Ezequiel Aquino, quien contrató su propio abogado, al Dr. Roberto Pagura, quien pidió discutir la medida cautelar solicitada por el fiscal luego de estudiar el legajo. Esa audiencia está prevista para este lunes 14 junio a las 10.00 am.
Mediante un comunicado, el Ministerio Público de la Acusación, MPA, expresó que «en razón de la existencia de un delito en concurso de ejecución que seguiría latente, cuya matriz es un reclamo social«, el Fiscal Mai, solicitó la participación de grupos interdisciplinarios especializados de la Municipalidad y de la provincia, «con competencia específica en la temática, que cuenten con la presencia de mediadores, negociadores o facilitadores que actúen profesionalmente para que procuren una solución pacífica al conflicto».
HOY
Vale señalar que tras haber atacado a las fuerzas policiales, los usurpadores lograron permanecer en el predio donde ahora permanecen bajo toldos, como el que vemos aquí.
Insisten en que van a resistir en el lugar con algunas variantes; mientras que algunos sostienen que no se van a mover, otros señalan que estarían dispuestos a aceptar un terreno en otro lugar, pero todos exigen «ya» una solución de acceso al hábitat.
Radiografía
La gran mayoría de los demandantes son parejas jóvenes de entre 18 y 25 años, con hijos, hacinados en casa de padres, suegros o abuelos, en algunos casos, hasta cuatro generaciones juntas y de manera muy precaria. Cuentan que viven de changas y de la ayuda social. A pesar de ser jóvenes, dicen que ya están cansados de las promesas de los políticos de que les van a facilitar el acceso a un terreno. Ya no esperan, usurpan.