Medalla de Oro a la innovación tecnológica para una cosechadora desarrollada, diseñada y construida aquí por Dolbi s.a.

La recientemente presentada cosechadora de algodón autopropulsada HAC 5.000, desarrollada en Reconquista por técnicos del INTA y desde ahora fabricada en serie por Dolbi s.a. en sus talleres de la ciudad de Avellaneda, fue galardonada con la Medalla de Oro a la Innovación Tecnológica; y Mención Especial al Diseño Industrial.

Este galardón, que es como ganar el Martín Fierro de las maquinarias, da a la empresa otro empujón para ingresar a los mercados internacionales, que es la pretensión, contó el presidente de la empresa, Elbio Dolzani. Explicó que Expoagro tiene un convenio con  Alemania mediante el cual se intercambia información con el mundo entero, por lo que este reconocimiento es valioso para ganar mercados, además de Sudáfrica, Sudan e Irán, que ya confían en la calidad de las máquinas agrícolas Dolbi s.a. Entre los nuevos mercados que apuntan está el de los Estados Unidos. Desde Georgia ya pidieron cotizaciones. Ingresar a EEUU es muy complejo, lo que multiplica el desafío, explicó el empresario.

 Informó lo difícil que es competir con un dólar comercial a $80.-, «muy bajo», lo que complica competir con lo que se fabrica en el exterior. Y por si hiciera falta, aclaró que la empresa no recibe los dólares en billete al exportar, eso queda en poder del Estado Nacional, que liquida en pesos y a ese valor de referencia.

Otra dificultad para la actividad es la inflación en dólares que tiene Argentina. Puso como ejemplo que la tonelada de chapa pasó de 800 a 1.100 dólares puesto en usina. Encima hay una escasez muy grande de chapas, ya que la emergencia sanitaria por el Coronavirus Covid-19 retrasó la producción. El drama del aislamiento por la pandemia también lo padece Dolbi, que al momento de la entrevista tenía 6 empleados sin poder asistir al trabajo.

«Tenemos la suerte que en el mundo no hay máquinas de la gama que nosotros estamos haciendo, todavía podemos decir que el mundo nos compra porque no hay otra máquina como la que se fabrica en Avellaneda”, manifestó orgulloso el empresario.

Respondió que desde abril de 2020, Dolbi s.a. trabaja a plena producción y con alguna demora para satisfaccer la demanda, con entregas pactadas para el primer semestre de 2021.

En la 7a edición del Premio Ternium Expoagro a la Innovación Agroindustrial, compitieron 70 desarrollos presentados en 12 rubros, de los cuales 61 llegaron a la instancia de jura.

En 2017, Dolbi s.a. ya había ganado una Medalla de Oro por otra máquina de fabricación local: la Roto-Enfardadora.

MAS INVERSIONES

«Vamos a seguir trabajando, compramos un torno numérico y una máquina de corte”, dijo el empresario, quien anticipó que la inversión prevista para el período 2020/2021 ronda los 100 millones de pesos. También creció la planta de personal, que pasó de 80 a 100 personas.

«Hay un trabajo en equipo, solo estoy al frente, pero hay un trabajo de todos que aportaron su granito de arena para que esto crezca”, concluyó.

Historia de Dolbi

A mediados de la década del ´50, la pujante región norte de Santa Fe, zona típicamente productora de algodón y cereales, encontró un obstáculo a la hora de tecnificar la producción, dado que las pocas máquinas sembradoras existentes, eran importadas y carecían de una adaptación plena a estas tierras. Ante esta realidad, Humberto Dolzani, comenzó a reparar este tipo de implementos, y poco tiempo después, motivado por un aumento significativo del trabajo, decidió crear implementos pensados en las necesidades reales de los productores regionales. Transcurriendo 1962, Humberto y Carlos Dolzani, junto a Alberto Bianchi le dan forma una nueva firma que nacía, DOLZANI y CIA S.R.L., que con el transcurrir del tiempo, pasó a denominarse DOLBI S.A.